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El color más común es el llamado "sal y pimienta",
ya sea claro u oscuro, en tonos diferentes de gris, incluyendo el plata
(que realmente es un sal y pimienta muy claro, que ya perdió el color negro, lo cual no es deseable) que generalmente
va prevaleciendo conforme es rasurado; permitiéndose en algunos países también el matiz canela. Se
caracterizan en general por presentar en cada pelo diversas bandas de blanco,
gris y negro, de varias
tonalidades, así como mezclas de ellos en todo el manto.
La coloración sal y
pimienta se va desvaneciendo hasta gris claro o blanco plata en las cejas, las
patillas, los carrillos, debajo de la garganta, en el pecho, debajo de la cola,
adornos de las patas, parte inferior del cuerpo y la parte inferior de las
patas. Para resaltar su expresión, todos los tonos deben observar una máscara
obscura que se funda armoniosamente con el tono general del manto.
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